Aula virtual: una solución al sistema escolar híbrido

A más de un año del cierre de las escuelas y ante la expectativa de un regreso a clases bajo un sistema escolar híbrido, quizá a muy pocos le quedan todavía dudas acerca de lo necesario que es un aula virtual.

Y es que si antes de la pandemia, estas herramientas eran eficientes y complementarias para las clases presenciales, ahora son un elemento pilar y básico dentro de cualquier escuela.

El aula virtual se volvió uno de los mejores recursos para proveer de todo lo necesario en el proceso de enseñanza y aprendizaje. Sin importar el nivel educativo del que hablemos, las aulas ofrecen un diseño fácil de sesiones, la capacidad para almacenar y compartir todos los contenidos de un curso (información y conocimientos) a través de documentos y materiales de diversa índole (blogs, PDF, vídeos, podcast, etc.), elaboración de evaluaciones dinámicas y otra infinidad de posibilidades.

Ahora con el sistema escolar híbrido en boca de todos, la preocupación de los docentes y una fila de padres de familia inseguros sobre la carga de trabajo que esto podría implicar, lo mejor es contar con una herramienta digital y pedagógica.

El aula virtual más que tratarse de un modelo educativo o método de enseñanza, es un canal o vía para facilitar el conocimiento para todos. Se trata de una herramienta que garantiza el derecho a la educación.

Te puede interesar:

< Guía para un regreso a clases seguro durante la pandemia >

¿Cómo ayuda un aula virtual al sistema escolar híbrido?

En muchos centros educativos de diversos países, incluido México entre ellos, hubo experiencia con sistemas educativos híbridos. Después del terremoto de 2018, universidades como el Tecnológico de Monterrey, recurrieron a esta vía para poder continuar las clases.

Ahora con ciclo escolar 2021-2022 por iniciar, casi respirandonos en la espalda, muchos estados de México están a la expectativa de cómo pueda suceder y qué será necesario. Puebla es uno de las entidades que ya cuenta con un documento para el uso del personal docente de educación básica y media superior. Se titula como Modelo Educativo Híbrido en el Estado de Puebla Educación Básica y Media Superior Ciclo Escolar 2021-2022.

En dicho documento la Secretaría de Educación de Puebla afirma el propósito operativo que tiene esta guía:

[ ] aportar al colectivo docente de la Educación Básica y Media Superior un conjunto de referentes conceptuales, pedagógicos, metodológicos y organizacionales integrando aspectos fundamentales de la modalidad presencial y a distancia orientados a fortalecer la autonomía del aprendiente como el elemento esencial de la mejora de los aprendizajes.

Asimismo, enfatiza la importancia de que la educación virtual y a distancia tengan continuidad de contenidos y objetivos a través de un diseño adecuado de las actividades y exámenes o proyectos:

[ ] la presente propuesta enfatiza la importancia de lograr la continuidad entre los espacios, tiempos, contextos y metodologías para promover la construcción del aprendizaje como un proceso permanente, situado y continuo, garantizando el Derecho a la Educación de las niñas, niños, jóvenes, adolescentes y adultos (NNAJyA) [ ].

Para lograr una congruencia y una sensación de continuidad en los aprendizajes, las aulas virtuales son herramientas tan importantes como lo fueron en su momento los pizarrones.

Un aula virtual es una especie de “Aleph” en el que podemos juntar espacios, tiempos, realidades y formas de enseñanza diversas. Por lo que es el complemento perfecto para las clases presenciales, así como para darle seguimiento a estudiantes con condiciones de salud física y mental que necesiten asesoría o asistencia.

Además, ante cualquier caso de COVID-19 que requiera aislamiento y cuarentena entre el alumnado y profesores, será un buen recurso para continuar las clases y no atrasarse en el ciclo escolar.

Optimización del tiempo y grupos con un aula virtual

La modalidad híbrida es, pues, el cruce de dos modalidades: la presencial y la educación a distancia. A las clases presenciales las distingue la interacción e intenciones comunicativas como el lenguaje corporal, el tono de voz y el uso de determinadas palabras.

Además, por supuesto, la educación presencial se distingue por tener un elemento muy importante que es la dimensión social del aprendizaje. Esta dimensión se distingue por el manejo de las relaciones interpersonales, el trabajo en equipo y diferentes oportunidades de socializar los conocimientos.

Sin embargo, las recomendaciones sanitarias obligan a que la socialización se realice en grupos pequeños y bajo medidas más controladas, es decir, con un manejo estratégico. En dichas circunstancias, el aula virtual puede apoyar en la presentación de diversos contenidos y formas de organización con tiempos más flexibles y bajo diferentes ritmos.

Así, la distancia y la reducción aplicada a grupos y tiempos no estará limitado gracias a la educación virtual.

¿De qué funciones me provee un aula virtual?

Algo que resulta clave para salir avante y victorioso en este nuevo reto que plantea el modelo híbrido es el diseño estratégico de las actividades de aprendizaje para la evaluación del proceso, así como de los exámenes y los proyectos para la evaluación del logro académico del curso, ya que la división de estos tiene que ir pensando en cuál formato o canal será presentado.

Para eso, te mencionamos algunas de las funciones y los recursos con los que cuenta casi cualquier aula virtual y que podrías utilizar sin el menor problema:

Diseñar cursos y sesiones.
Crear videoconferencias o salas virtuales para clases en línea.
Elaborar evaluaciones para la asignatura, junto con la ponderación asignada y la relación de componentes vistos en el curso con la evaluación.
Agregar ejercicios y configurar el contenido de acuerdo con los objetivos de aprendizaje.
Crear tareas con fechas y espacio para la entrega y carga de trabajos.
Adjuntar documentos informativos como glosarios, diccionarios, asistencia, planeación didáctica, registro de actividades entregadas y puntajes obtenidos.
Subir materiales del curso como enlaces, capítulos de libros o revistas, vídeos, podcast, entre otros.
Colocar lecciones o temas de la asignatura.
Verificar actividades asincrónicas y sincrónicas en un calendario.
Habilitar chat y red social.

La forma en que puedas gestionar la educación híbrida depende de que utilices tus recursos de manera óptima. Los salones de clases ventilados, los grupos pequeños y la asistencia escalonada no son suficientes, debido a que el tiempo y el espacio puede hacer sentir limitado al personal docente. Lo mejor es decidirse por un aula virtual que de preferencia tenga el respaldo de una empresa en soluciones educativas y digitales, así como que cuenta con asesores que puedan ayudar en todo lo técnico.

Te puede interesar: