A todos nos interesa la seguridad escolar. Queremos que los centros educativos sean espacios realmente seguros que permitan el adecuado desarrollo intelectual y físico de los estudiantes. Por lo que enfocar nuestras acciones en el bienestar, seguridad y prevención de riesgos permite que cada uno de los miembros de nuestra comunidad educativa ejerza su pleno derecho a la educación y el trabajo con libertad y responsabilidad.
¿Qué es la seguridad escolar?
Es una pregunta que, quizá, hace algunos años habría recibido solo respuestas relacionadas a la salud y la seguridad física que, si bien siguen siendo de suma importancia, hoy también tenemos que darle prioridad a la salud mental y la sana convivencia de nuestros alumnos.
Debido a que nos encontramos siendo líderes educativos dentro de una sociedad avasallada por las nuevas tecnologías, las redes sociales y los medios de comunicación, ahora resulta cada vez más complicado manejar la seguridad escolar en sus distintos aspectos: físico y mental.
Las familias están preocupadas porque garanticemos edificios y plataformas virtuales seguras y confiables; procuremos una cultura de la prevención en caso de desastres o emergencias a través de protocolos de actuación y simulacros; así como que estemos atentos al clima de aula entre los estudiantes y los docentes.
Por ejemplo, debemos prevenir problemáticas serias como el bullying y el ciberbullying, que este último es básicamente el mismo acoso entre pares dentro de una relación asimétrica y violenta, donde uno tiene el poder sobre el otro, pero desde medios virtuales. Tal como sucedió con Jorge Barrera, el caso del estudiante de la preparatoria 5 de la UNAM, quien afortunadamente fue localizado con vida después de huir de su casa a causa de una mala broma de sus compañeros de clase, quienes en plena pandemia lo engañaron de que el 3 de noviembre se regresaba a clases presenciales, por lo que el estudiante se presentó a las instalaciones para, sin saberlo, ser objeto de burlas horas después.
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3 acciones para fortalecer la seguridad escolar
Ahora con las clases y las formas de relacionarnos principalmente virtuales, tenemos que establecer protocolos de seguridad y vigilancia que propicien que los estudiantes se encuentren a gusto y sean responsables en el trato que tienen hacia los otros, así como los docentes con ellos. En los últimos años han salido muchas denuncias de situaciones de violencia escolar y violencia de género, donde en más de una ocasión niñas y adolescentes fueron violentados por profesores mediante WhatsApp y redes sociales.
Existen 3 formas que pueden implementarse para prevenir y reducir la inseguridad en las aulas físicas y virtuales. Llevarlas a cabo en equipo y de manera coordinada, dejará una mejoría en la percepción de seguridad del alumnado, los tutores y las familias.
1. Protocolos de seguridad escolar
Los tutores y familiares responsables de los alumnos probablemente se preguntará cuáles son los protocolos de seguridad que se siguen dentro de la escuela en caso de fugas de gas, incendios, temblores, huracanes y casos extraordinarios y lamentables como tiroteos, tal como pasó en el Colegio Americano de la ciudad de Monterrey en el año 2007.
Por ello, es importante que respondamos con acciones a preguntas acerca del resguardo de los menores y las formas de contención emocional que se les proporcionarán ante este tipo de situaciones. Así, tenemos que procurar una cultura de la prevención a través de la realización de simulacros de manera periódica; invitando a conferencistas de temas como la paz y convivencia social, el gobierno suele brindar estos servicios de manera gratuita mediante las secretarías de educación o seguridad pública; capacitando a todo el personal de la escuela en protocolos de seguridad escolar en caso de emergencia, así como de actuación en caso de acoso y violencia escolar.
Este plan de seguridad debe estar compuesto por los participantes, las acciones y los medios. Los participantes de estas acciones pueden ser desde los maestros hasta los prefectos, por lo que deben tener claros sus roles de quién hará qué durante un determinado tiempo, por ejemplo, en los simulacros alguien debe tocar la campana o timbre de emergencia, mientras que otra persona debe pasar salón por salón para asegurarse de que todos hayan sido evacuados.
En cuanto a las acciones, pueden variar de acuerdo a la situación que se esté tratando de prevenir. Si fuera el caso del bullying o el ciberbullying, lo ideal es asesorarse con expertos como psicólogos escolares o trabajadores sociales, así como consultar los protocolos oficiales que tienen algunos estados de México. Normalmente en los protocolos se explica qué es este fenómeno, cómo detectarlos y qué hacer cuando ha ocurrido ya.
Finalmente, estos esfuerzos de coordinación pueden ser todavía más efectivos si nuestras acciones son respaldadas por medio de herramientas que nos garanticen una comunicación constante y fácil con los tutores y las familias. Ejemplo de ello son los sistemas de gestión escolar como School Manager, que tiene un sistema de envío de mensajes SMS y correos electrónicos.
2. Prevención de riesgos para la seguridad escolar con valores ciudadanos
Los valores ciudadanos son importantes para fomentar la paz y la sana convivencia entre los estudiantes. Para facilitar espacios seguros, no basta con decirlo, también hay que modelar y demostrarlo desde las acciones que se llevan a cabo día con día.
Los valores deben volverse contenidos que puedan enseñarse transversalmente en las clases de todas las asignaturas, por lo que cada actividad de aprendizaje debe aprovecharse como una oportunidad para aprender sobre la honestidad, la tolerancia, la empatía, la lealtad y el respeto.
Los trabajos en equipo y los debates son actividades que pueden usarse en cualquier materia para fomentar los valores, tanto de manera presencial como virtual, y ayudar a crecer el sentido de inclusión dentro de un grupo.
Otra manera de fomentar los valores es la construcción conjunta, entre alumnos y docentes, de las normas de convivencia. Es necesario que los estudiantes se sientan incluidos en el establecimiento de los límites y derechos dentro de la convivencia escolar, pues de esta manera los comenzamos a hacerlos responsables de todos sus actos.
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3. Control de seguridad escolar automático para instalaciones
Finalmente, en muchas escuelas de México se ha vuelto indispensable la implementación de controles de seguridad más estrictos que permitan garantizar el bienestar de los estudiantes y el personal del centro educativo. La tecnología, a paso galopante, ha permitido que las escuelas adquieran nuevas herramientas para tener espacios más seguros y libres de violencia.
A través de los controles de Seguridad y Asistencia Biométrica de School Manager, las escuelas pueden controlar la entrada y salida de los estudiantes a través de una huella digital, reconocimiento facial, tarjetas de proximidad, torniquetes, puertas y barreras para estacionamientos. Así como, en caso de escuelas primarias o secundarias, la entrega y recepción de los alumnos podrán ser realizadas únicamente por personas autorizadas por los tutores de los niños.
Este tipo de controles también informarán vía SMS a los padres de familia cuando un alumno entra o sale de la escuela, brindándole tranquilidad en su día a día y garantizando la seguridad escolar.
Si deseas conocer más detalles sobre cómo puedes recibir estos beneficios y conocer todas las características de nuestros modernos sistemas de Seguridad Escolar, contáctanos y con gusto uno de nuestros asesores podrá ayudarte.
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